Gracias una vez más por este texto el 1 de noviembre. Siempre vuelvo a ellos cuando no se como expresar como me siento con respecto a la perdida de mi padre. El tiempo a suavizado el dolor, este año han hecho 15 años. Su nieta, mi hija mayor y la única que conoció, ha empezado este año la Universidad. El otro día pensaba que él nunca la verá convertirse en médico, quizás yo tampoco nunca se sabe, pero en ese momento ese pensamiento me dolió como si hubiera muerto hace 15 días, supongo que será algo de luto hacia delante. Un abrazo
Vaya llorera al leerte. Mi padre falleció hace cinco años y mi madre hace nueve. Me hacen muchísima falta porque eran mi Km0, mi lugar seguro, mi equilibrio. Puede parecer egoísta por mi parte, pero lo siento así. Y sí, no siempre somos hijos de la misma manera. Hay días que me atormento pensando que debería haberles dedicado más tiempo. Hoy fui al cementerio a llevarles rosas y gladiolos y estuve un rato hablando con ellos. Besos, Molinos
Es hermoso cómo cuentas la progresión de lo que supone ser hijo.
A mis 36 años, y aún habiendo dejado el núcleo familiar hace tiempo, me he sorprendido al observar que mis padres siguen siendo ese "punto de retorno, el sitio seguro al que volver, el centro del que te alejas pero al que sabes que siempre puedes volver, ese punto inamovible y fuertemente anclado..."
Disfrútalo porque se acabará y es un giro vital al que uno intenta resistirse, que intenta evitar pero no se puede, hay que aprender a vivirlo cuando llega.
Hace 15 meses que mi madre murió y no sabes cómo me remueven tu texto.
Sí pudimos despedirnos, pero con la perplejidad del que no se cree que esté pasando tal cosa. La vida toma otra forma con este vacío enorme que no desaparece.
Me ha hecho reflexionar tu post de hoy, a mi ya solo me queda una parte de esa pareja que son los padres, en este caso mi madre. Mi hermana, la noche anterior a hoy, saca las fotos de los que ya no están en la familia, similar a como hacen en Méjico y los tiene presentes en familia, con las crías, me parece una forma de tenerlos, aunque nunca se olvidan. Y para mi siempre es un "miedo" ¿me olvidaré de como era la cara de mi padre?, por suerte tenemos una caja negra, nuestro cerebro, que en sueños nos trae y reencuentra con aquellos que no están.
La primera vez que escribí sobre mi padre en Cosas que (me) pasan escribí "Lo primero que se me olvidó fue su voz. No quiero que se me olvide nada más". Mi padre murió antes de wsap y los móviles con todo, asi que no tenemos mas que alguna grabación rara de su voz. Se nos ha olvidado... cuando, pasados 3 o 4 años de su muerte, encontré una grabadora y le di al play, escuché su voz y me cai al suelo de la impresión...
Me encanta la foto de tu padre. Este 1 de noviembre cobra un significado especial cuando hemos perdido a alguien, aunque sea ley de vida.
Mi padre falleció de repente y no nos pudimos despedir. Fue en pandemia, alejados de todo y de todos, sin contacto. Cuando escribí unas letras para su funeral hablé, entre otras muchas cosas, de los prismas de una persona, de la multitud de caras.
Cuando se marchan, hay mil cosas de ellos que nunca sabremos y una parte de nuestra propia vida se marcha con ellos.
Gracias por tus palabras. Es un buen homenaje a tu padre.
Hola Isabel, mi padre murió de repente, con 53 años, el 1 de noviembre que es además el cumpleaños de mi madre. Ese día aprendí que no hay un futuro, no tenemos ni siquiera una semana que viene. Hay que vivir ahora, uno siempre cree que tendrá tiempo pero no es así, yo nunca sabré mil historias de mi padre antes de conocerme ni como hubiera vivido sus años siguientes.
Ay! Solo se puede entender ese sentimiento cuando has pasado por el.
Ojalá todo lo que nos hace bien fuera eterno.
Mi padre tb falleció pero no nos dio tiempo a vivir su duelo en calma ya que 4 meses después fue mi madre la que después de un “mañana nos vemos” paso a ser meses buscando la alegria perdida.
Mis padres se fueron sin avisar hace ahora 5 años, con seis meses de diferencia. Yo vivía en Alemania entonces. No recuerdo cuando fue la última vez que los vi, pero imagino que fue en el aeropuerto. Noviembre siempre ha sido mi mes favorito. Desde hace 5 años lo empiezo con agradecimiento y cada vez más consciente de la suerte que tuve y que tengo.
Hace un rato que estoy despierta y ha sido una sorpresa encontrarme con esta nueva entrada. Aunque no sienta algunas de las cosas que expresas y en cierta forma me sienta un poco más triste hoy, te agradezco que lo hayas compartido. La relación con los padres a veces provoca mucho sufrimiento y cuando leo lo que cuentas no sé qué hacer con él.
Hace 14 meses que dejé de ser hija. Gracias, Ana.
Precioso texto!!
¡Gracias!
Gracias.
Gracias una vez más por este texto el 1 de noviembre. Siempre vuelvo a ellos cuando no se como expresar como me siento con respecto a la perdida de mi padre. El tiempo a suavizado el dolor, este año han hecho 15 años. Su nieta, mi hija mayor y la única que conoció, ha empezado este año la Universidad. El otro día pensaba que él nunca la verá convertirse en médico, quizás yo tampoco nunca se sabe, pero en ese momento ese pensamiento me dolió como si hubiera muerto hace 15 días, supongo que será algo de luto hacia delante. Un abrazo
Hola Julia. El luto hacia delante no se acaba nunca, le vas encontrando rincones sin explorar con cada año que pasa. Un abrazo
Vaya llorera al leerte. Mi padre falleció hace cinco años y mi madre hace nueve. Me hacen muchísima falta porque eran mi Km0, mi lugar seguro, mi equilibrio. Puede parecer egoísta por mi parte, pero lo siento así. Y sí, no siempre somos hijos de la misma manera. Hay días que me atormento pensando que debería haberles dedicado más tiempo. Hoy fui al cementerio a llevarles rosas y gladiolos y estuve un rato hablando con ellos. Besos, Molinos
Un abrazo gigante, querida Esther.
Es hermoso cómo cuentas la progresión de lo que supone ser hijo.
A mis 36 años, y aún habiendo dejado el núcleo familiar hace tiempo, me he sorprendido al observar que mis padres siguen siendo ese "punto de retorno, el sitio seguro al que volver, el centro del que te alejas pero al que sabes que siempre puedes volver, ese punto inamovible y fuertemente anclado..."
Disfrútalo porque se acabará y es un giro vital al que uno intenta resistirse, que intenta evitar pero no se puede, hay que aprender a vivirlo cuando llega.
Como remueven tus palabras…gracias
Un abrazo
Hace 15 meses que mi madre murió y no sabes cómo me remueven tu texto.
Sí pudimos despedirnos, pero con la perplejidad del que no se cree que esté pasando tal cosa. La vida toma otra forma con este vacío enorme que no desaparece.
Gracias por tus palabras.
Es un antes y un después y se aprende a vivir en esa nueva realidad. Date tiempo y atraviesa el luto con calma. Un abrazo
Así es tal como lo cuentas…
Mis hijos son mayores e independientes y me siento “ obligada” a protegerles a no fallarles, a tener la respuesta o solución adecuada…
También pase a ser madre de mi madre hasta que murió el año pasado y ahora siento que soy ella hasta en las cosas que no me gustaban.
Y poco a poco, en algunos aspectos, estoy empezando a ser la hija de mis hijos.
Molinos, siempre nos dejas tocados.
Excelente.
Grcias, Esther. Un abrazo. Ninguno somos una sola cosa, somos varias pero eso no lo sabemos hasta muy adelante en la vida.
Me ha hecho reflexionar tu post de hoy, a mi ya solo me queda una parte de esa pareja que son los padres, en este caso mi madre. Mi hermana, la noche anterior a hoy, saca las fotos de los que ya no están en la familia, similar a como hacen en Méjico y los tiene presentes en familia, con las crías, me parece una forma de tenerlos, aunque nunca se olvidan. Y para mi siempre es un "miedo" ¿me olvidaré de como era la cara de mi padre?, por suerte tenemos una caja negra, nuestro cerebro, que en sueños nos trae y reencuentra con aquellos que no están.
La primera vez que escribí sobre mi padre en Cosas que (me) pasan escribí "Lo primero que se me olvidó fue su voz. No quiero que se me olvide nada más". Mi padre murió antes de wsap y los móviles con todo, asi que no tenemos mas que alguna grabación rara de su voz. Se nos ha olvidado... cuando, pasados 3 o 4 años de su muerte, encontré una grabadora y le di al play, escuché su voz y me cai al suelo de la impresión...
Me encanta la foto de tu padre. Este 1 de noviembre cobra un significado especial cuando hemos perdido a alguien, aunque sea ley de vida.
Mi padre falleció de repente y no nos pudimos despedir. Fue en pandemia, alejados de todo y de todos, sin contacto. Cuando escribí unas letras para su funeral hablé, entre otras muchas cosas, de los prismas de una persona, de la multitud de caras.
Cuando se marchan, hay mil cosas de ellos que nunca sabremos y una parte de nuestra propia vida se marcha con ellos.
Gracias por tus palabras. Es un buen homenaje a tu padre.
Hola Isabel, mi padre murió de repente, con 53 años, el 1 de noviembre que es además el cumpleaños de mi madre. Ese día aprendí que no hay un futuro, no tenemos ni siquiera una semana que viene. Hay que vivir ahora, uno siempre cree que tendrá tiempo pero no es así, yo nunca sabré mil historias de mi padre antes de conocerme ni como hubiera vivido sus años siguientes.
Gracias a ti
Me tienes llorando a moco tendido.
Un abrazo.
Ay! Solo se puede entender ese sentimiento cuando has pasado por el.
Ojalá todo lo que nos hace bien fuera eterno.
Mi padre tb falleció pero no nos dio tiempo a vivir su duelo en calma ya que 4 meses después fue mi madre la que después de un “mañana nos vemos” paso a ser meses buscando la alegria perdida.
Gracias por tus palabras
Ay, Montse. Lo siento muchísimo. Un abrazo
Qué acertada siempre con tus palabras, Ana.
Mis padres se fueron sin avisar hace ahora 5 años, con seis meses de diferencia. Yo vivía en Alemania entonces. No recuerdo cuando fue la última vez que los vi, pero imagino que fue en el aeropuerto. Noviembre siempre ha sido mi mes favorito. Desde hace 5 años lo empiezo con agradecimiento y cada vez más consciente de la suerte que tuve y que tengo.
Gracias Ana.
Un abrazo, Carolina.
Al final a todos nos pasan las mismas cosas. Remueve mucho todo lo que escribes. Gracias
Si, todos somos parecidos y la muerte y lo que supone es igual para todos aunque nos resistamos.
Hace un rato que estoy despierta y ha sido una sorpresa encontrarme con esta nueva entrada. Aunque no sienta algunas de las cosas que expresas y en cierta forma me sienta un poco más triste hoy, te agradezco que lo hayas compartido. La relación con los padres a veces provoca mucho sufrimiento y cuando leo lo que cuentas no sé qué hacer con él.
Siento mucho tu sufrimiento Silvia. Un abrazo