Hace días que pensé en retocar los pensamientos feministas para mis hijas que escribí hace siete años. Empecé a hacerlo y cuando llevaba un rato rumiando los cambios me di cuenta de que no era eso lo que quería contar. Quería contar que ser mujer y ser feminista es agotador. Ayer participé en la tertulia de
Yo también creo lo que importa son los pequeños gestos para lograr un cambio pero me posiciono al lado de la gente que lucha por las desigualdades desde un macro nivel, quizá porque por mi trabajo veo muchas injusticias y creo que también es importante hacerlo.
Lo que no soporto es a las personas, sobre todo cuando son mujeres, que dicen que no existe la desigualdad ni el machismo y normalmente lo dicen desde su supercasa, con filipina incluida y marido exitoso económicamente y que se dedican a organizar mercadillos. Me sobrepasa.
Hoy me ha encantado tu entrada. Hay días en los que, por agotamiento, ni el de proximidad practico. Pero si intento que me guíe en las distancias cortas, y sobre todo, sobre todo, en mis interacciones con mis compañeros, amigos, hijos... Lo ven desde el privilegio, y no se dan cuenta de que están instalados ahí. Igual que es importante recordar nuestro privilegio, hay que hacérselo ver a los demás.
Olé 👏 siempre das en el clavo y me quedo esta vez con esto:’ no se puede abarcar todo. Es fascinante cómo estamos entrando por el caminito de entender que no se puede ser superwoman y abarcar curro, casa, amantes, amigos, hobbies e impuestos con el mismo nivel de implicación pero pretendamos crear un feminismo todopoderoso e omnipresente’.
Igual que no tengo tiempo para preocuparme por el fin del mundo, las élites o vaya usted a saber lo que sea que se cocina desde arriba, llego hasta donde llego. Y prefiero emplear mi tiempo leyendo (blogs como el tuyo, por ejemplo) que intentar llegar a todo! Gracias por inspirar.
Esta semana siempre es muy difícil para mí. Y a veces hay que valorar el trabajo diario de “pico y pala” que hacemos cada una de nosotras. Qué acertado lo de feminismo de proximidad. Totalmente de acuerdo. Un gusto leerte.
Amén. Feminismo de proximidad, feminismo asequible, el que cada una pueda hacer en su día a día. Y también el no hacer nada, porque hay días que la vida nos pasa por encima y mira, no siempre hay energía para todo.
A mí también me da rabia todo lo que dices! Y apuesto por ese feminismo de proximidad, aunque no alcance la perfección, algún poso dejará en nuestro alrededor! 💪💜
Me gusta estar en desacuerdo contigo porque al menos haces que piense en otras cosas. Poner en cuestión lo que creo o pienso me ayuda y me satisface. Hoy no es ese día. Hoy estoy muy de acuerdo y es porque hago lo mismo que tú. Suspendo como tú, tengo un feminismo pequeño, normalmente mi nivel de imperfección es alto y me importa un pimiento y soy eminentemente práctica que es lo que mueve el mundo, la acción. Efectivamente no se pueden abordar todos los aspectos porque es un sinsentido y hay que trocear el elefante. A cada una nos toca un trocito y entre todos y todas lo conseguiremos.
Gracias Ana, yo no lo hubiera explicado mejor. No sé si és que me hago mayor pero cada vez pienso más en que los grandes cambios residen en los pequeños gestos. Yo también he llegado a este 8 de marzo agotada, sin saber qué pancarta sostener y tu post me ha aclarado muchas cosas.
Hola!
Yo también creo lo que importa son los pequeños gestos para lograr un cambio pero me posiciono al lado de la gente que lucha por las desigualdades desde un macro nivel, quizá porque por mi trabajo veo muchas injusticias y creo que también es importante hacerlo.
Lo que no soporto es a las personas, sobre todo cuando son mujeres, que dicen que no existe la desigualdad ni el machismo y normalmente lo dicen desde su supercasa, con filipina incluida y marido exitoso económicamente y que se dedican a organizar mercadillos. Me sobrepasa.
Un abrazo
Hoy me ha encantado tu entrada. Hay días en los que, por agotamiento, ni el de proximidad practico. Pero si intento que me guíe en las distancias cortas, y sobre todo, sobre todo, en mis interacciones con mis compañeros, amigos, hijos... Lo ven desde el privilegio, y no se dan cuenta de que están instalados ahí. Igual que es importante recordar nuestro privilegio, hay que hacérselo ver a los demás.
Totalmente de acuerdo. Que importante es el feminismo de proximidad. Me encanta la imagen de verlo propagarse como ondas en un lago. ¡Gracias!
AMÉN. Has puesto maravillosas y clarividentes palabras a lo que sentimos muchas.
Totalmente de acuerdo, no podemos dar solución a lo de fuera sino atendemos antes lo de dentro.
Olé 👏 siempre das en el clavo y me quedo esta vez con esto:’ no se puede abarcar todo. Es fascinante cómo estamos entrando por el caminito de entender que no se puede ser superwoman y abarcar curro, casa, amantes, amigos, hobbies e impuestos con el mismo nivel de implicación pero pretendamos crear un feminismo todopoderoso e omnipresente’.
Igual que no tengo tiempo para preocuparme por el fin del mundo, las élites o vaya usted a saber lo que sea que se cocina desde arriba, llego hasta donde llego. Y prefiero emplear mi tiempo leyendo (blogs como el tuyo, por ejemplo) que intentar llegar a todo! Gracias por inspirar.
Sí, sí y sí. Gracias Ana.
Esta semana siempre es muy difícil para mí. Y a veces hay que valorar el trabajo diario de “pico y pala” que hacemos cada una de nosotras. Qué acertado lo de feminismo de proximidad. Totalmente de acuerdo. Un gusto leerte.
Amén. Feminismo de proximidad, feminismo asequible, el que cada una pueda hacer en su día a día. Y también el no hacer nada, porque hay días que la vida nos pasa por encima y mira, no siempre hay energía para todo.
Qué bien escrito Ana! Muchas gracias por ponerle palabras tan claras a un sentimiento tan complejo. Un abrazo!
A mí también me da rabia todo lo que dices! Y apuesto por ese feminismo de proximidad, aunque no alcance la perfección, algún poso dejará en nuestro alrededor! 💪💜
Me gusta estar en desacuerdo contigo porque al menos haces que piense en otras cosas. Poner en cuestión lo que creo o pienso me ayuda y me satisface. Hoy no es ese día. Hoy estoy muy de acuerdo y es porque hago lo mismo que tú. Suspendo como tú, tengo un feminismo pequeño, normalmente mi nivel de imperfección es alto y me importa un pimiento y soy eminentemente práctica que es lo que mueve el mundo, la acción. Efectivamente no se pueden abordar todos los aspectos porque es un sinsentido y hay que trocear el elefante. A cada una nos toca un trocito y entre todos y todas lo conseguiremos.
Gracias Ana, yo no lo hubiera explicado mejor. No sé si és que me hago mayor pero cada vez pienso más en que los grandes cambios residen en los pequeños gestos. Yo también he llegado a este 8 de marzo agotada, sin saber qué pancarta sostener y tu post me ha aclarado muchas cosas.
Pues muy claro dicho. Quizás tienes razón y es en lo cercano donde podemos actuar
Ole, ole y ole. Toda la razón del mundo.
No puedo estar más de acuerdo con tu texto. Lo comparto en mis redes. Muchas gracias.