Cuaderno de vacaciones. 26 de agosto de 2024

Ya estamos en casa. Hemos entrado en el jardín a las ocho de la tarde después de diez horas de viaje. A las niñas  se les ha hecho más corto porque han hecho uso de su superpoder de dormir a placer y prácticamente se han teletransportado del pueblecito francés a la frontera y de Vitoria hasta casi nuestra casa. Los que conducimos hemos ido escuchando Hitler´s Olympics que forman la cuarta temporada de Revisionist History. Ha sido todo un viaje sonoro, nunca había reflexionado, ni siquiera pensado mucho en los Juegos Olímpicos de Berlín en 1936 pero en ocho episodios Malcom Gladwell te da un revolcón intelectual del que sales pensando: ¡puff... aquí hay mucho para pensar! Por ejemplo, yo no sabía que Hitler no quería los juegos y fue Goebbels el que le dijo que les convenía por la promoción. No sabía tampoco, no lo había pensado, que aunque hubo un pequeño movimiento entre los judíos americanos para boicotear los juegos por las leyes antisemitas alemanas, fueron los americanos, especialmente dos hombres, Avery Brundage y Charles Sherrill los que más hicieron porque los juegos se celebraran. Me he quedado con ganas de saber más de Dorothy Thompson, una periodista que en los años 20 y 30 tenía una columna en el Herald Tribune que leían 10 millones de personas al día y que quiso entrevistar a Hitler desde 1923, tras el frustrado golpe de estado. Lo persiguió hasta que en 1931 consiguió hacerlo y lo describió así: 

«Sólo los ojos son notables. De color gris oscuro e hipertiroideos, tienen el brillo peculiar que suele distinguir a genios, alcohólicos e histéricos.»

No sabía tampoco que los juegos anteriores a Berlin fueron en Los Ángeles en 1932. Esos juegos corrieron peligro de boicot porque en el mundo entero se levantó una ola de protesta e indignación por la condena a unos ocho chavales afroamericanos por algo que ni siquiera había sucedido. En Alemania se hicieron manifestaciones contra el gobierno americano y se tiraron piedras contra la embajada. Hay más historias alucinantes, en 1933 los nazis enviaron a un emisario a Alabama para que estudiara las leyes raciales que segregaban a los afroamericanos. Les pareció todo poco profesional, muy aleatorio y se escandalizaron con la política de “one blood drop” que consideraba negro a cualquier persona que hubiera tenido algún antepasado afroamericano sin importar cuantos años o generaciones hubieran pasado. Escandalizar a los nazis por ser demasiado racista. Hitler´s Olympics es un podcast para escuchar cogiendo apuntes, casi como si estuvieras en clase.

Me gusta viajar en coche, me permite pensar y desprenderme poco a poco del lugar que dejo atrás y prepararme para el lugar al que me encamino. Me gusta ver como cambia el paisaje, el cielo, las nubes, las construcciones, las matrículas de los coches, el surtido de patatas en las gasolineras, los anuncios a los lados de la autopista, la tipografía de los carteles que alertan sobre los atractivos de las regiones que voy atravesando, la vegetación, los árboles, el verde, el color del aire, la línea del horizonte. Cuando vuelvo en esas horas conduciendo me voy acostumbrando a mi vida. 

Ya estamos en casa. Escribo esto sentada en el porche con mi hermana, mis hijas y mi madre. No es fácil escribir mientras charlamos así que no sé que saldrá. 

Suenan grillos y el riego del jardín. 

No sé ni qué día de la semana es y  no quiero saberlo.

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